Disney compra Ikea

Esta mañana las bolsas de todo el mundo se han disparado ante la noticia de que la compañía norteamericana Disney ha comprado el 79% de Ikea pasando a ser su máximo accionista al punto que varias de las tiendas de muebles ya lucen emblemas de la compañía.

   La noticia ha cogido por sorpresa a todos los compradores que veían desde primeras horas de la mañana cómo aparecía un Mickey por la sección de sofás, un Pluto por la zona de los espejos o al mismísimo Darth Vader mirando cómo amueblar su cocina.

   Peter Oshit, responsable de Disney explicó a Imperial News que "estábamos siguiendo una estrategia para entrar en todas las casas de los ciudadanos, potenciar la marca Disney. Ahora que ya tenemos casi todas las plataformas cinematográficas más interesantes era hora de dar el siguiente paso y que los muebles de la casa tengan las orejas del ratón. Así, con el continúo visionado de la marca Disney fidelizaremos al cliente".

   Kaulr Strofförmbg, responsable de Ikea, también explicó a Imperial News que "la calidad de nuestros productos no variará por la compra por parte de Disney: ántes eran una mierda y ahora seguirán siendo la misma mierda. No deben preocuparse. Que haya llegado Disney sólo significa que ahora tendremos más diseños, muchos de ellos hilarantes y que ofrezcan dobles lecturas ultraconservadoras, católicas e infantiles hasta el hartazgo. En principio puede parecer un hándicap negativo pero como somos los únicos que ofrecemos muebles a estos precios, nos la suda".

Imagen difundida por Disney-Ikea

   Los clientes, por contra, no se muestran tan entusiasmados por la adquisicón como las bolsas financieras. Así, John Cumcake explicó que "yo pretendía comprar un mueble para el salón con un cierre elegante a la par que discreto. Ahora el cierre son dos putas orejas con la imagen del pato Donald. Soy traficante de crack. ¿Cómo puedo infundir respeto y miedo si en mi salón tengo al puto (sic) pato Donald?

   Opinión parecida nos la ofrecía Teresa Inés Lucrecia Ching Hang Nakatomi: "ahora, cada vez que abro la nevera, suena la música de Fantasía 2000, cuando tiro de la cadena suena la Marcha Imperial y los únicos sofás baratos están estampados con dibujos de Marvel Comics y Star Wars. Esto no es serio, joder".

   Pese a estas voces críticas compradas con vales descuento o directamente amenazadas de muerte, Peter Oshit explicó que "entendemos que haya cuatro gilipollas que vean mal esta adquisición. Estos enemigos de la democracia pueden creer que vamos a alterar el espíritu de Ikea y salvo que vamos a poner hamburguesas en los restaurantes, el resto permanecerá igual. estos presuntos terroristas de armas químicas deben estar tranquilos. Disney sólo va a enfatizar lo que ya se venía dando en Ikea. Ellos seguirán trabajando duro, con un sueldo menor y más horas de trabajo y nosotros recogerémeos los beneficios. Lógicamente, todos los muebles que aparezcan en las películas Disney serán de Ikea porque tenemos que vender, hasta en las películas de Star Wars, pero el usuario corriente no notará merma en su experiencia como cliente de Ikea... al menos mientras se siga dejando su sueldo".

   Habrá que esperar, pues, los primeros pasos de la compañía Disney y ver si la estantería Ostermugerdolfermhostremkalrrisien se convierte en la estantería Los cuatro fantásticos.